El archipiélago canario es, sin duda, uno de los destinos turísticos españoles por excelencia. Más allá de sus magníficas playas, alberga hermosas ciudades que han sabido adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su característica esencia colonial. Un ejemplo de ello es Santa Cruz de Tenerife, un destino que no te dejará indiferente.
Ubicada al noreste de la isla, la capital tinerfeña fue una ciudad portuaria de gran importancia. Su actividad comercial y su ubicación estratégica le permitieron crecer hasta convertirse en la ciudad cosmopolita y fascinante que es hoy en día.
Es una localidad muy accesible para ser recorrida y descubierta en un agradable paseo a pie. Sus principales atractivos se encuentran cercanos unos a otros y es posible completar la visita en un día. No obstante, si las temperaturas o las cuestas te dificultan la tarea, lo mejor es optar por tomar el tranvía que recorre una calle desde la parte baja hasta la parte alta.
Visitas imprescindibles en Santa Cruz de Tenerife
En este viaje virtual te vamos a mostrar los puntos más relevantes y representativos de la ciudad. Presta atención porque Santa Cruz de Tenerife tiene mucho que ofrecer.
Palmetum
¿Qué hay más característico del clima tropical que las palmeras? Esta particular planta que nos recuerda al calor del sol y las playas paradisíacas abunda en todo el archipiélago. Sin embargo, en Santa Cruz de Tenerife han querido rendirle un mayor homenaje materializado en el Palmetum.
Este jardín botánico de 12 hectáreas de extensión se ubica en una montaña artificial y ofrece unas espectaculares vistas del océano. Alberga en su interior una impresionante colección de más de 400 especies de palmeras y cerca de 2.000 especies de plantas tropicales y subtropicales.
Parque Marítimo César Manrique
Este complejo de ocio es la obra póstuma del conocido arquitecto canario César Manrique. Este paraíso urbano de 22.000 metros cuadrados ofrece diversas piscinas de agua salada, así como cascadas artificiales, un solárium y varios restaurantes.
Un lugar ideal para refrescarse en un caluroso día de verano. También podrás obtener unas magníficas vistas del Auditorio de Tenerife (obra de Santiago Calatrava), del Palmetum y del océano Atlántico.
Castillo de San Juan
A escasos metros del Parque Marítimo encontramos el Castillo de San Juan, ubicado en el centro de la ciudad frente a la costa. Esta fortaleza construida en 1644 fue una de las edificaciones militares defensivas más importantes de la isla.
Además, el característico tono de la piedra volcánica con la que está construido le valió el sobrenombre de Castillo Negro. Si bien no es posible acceder a su interior, su excelente estado de conservación lo convierte en una parada obligatoria para cualquier visitante.
Plaza de España
La Plaza de España es el centro neurálgico de la ciudad y la plaza más amplia de todo el archipiélago. Fue construida en 1929 sobre el lugar que ocupaba el Castillo de San Cristóbal, cuyas murallas aún pueden ser contempladas en una galería subterránea bajo el lago artificial de la plaza.
En esta importante plaza se encuentran el cabildo y el centro de información turística. Además, en el centro de la misma se halla el Monumento a los Caídos, un homenaje a los canarios que perdieron la vida en la Guerra Civil Española.
Mercado de Nuestra Señora de África
Este precioso edificio de los años 40 es uno de los más emblemáticos de la ciudad. Un lugar lleno de encanto que en sus dos plantas alberga los mejores productos de la gastronomía canaria, así como varias tiendas de artesanía. Por tanto, no dudes en detenerte en alguno de sus puestos para reponer fuerzas saboreando los mejores manjares locales.
Iglesia Matriz de la Concepción
Esta iglesia constituye el primer templo católico de Tenerife. Si bien fue edificada en 1494, la misma ha sufrido varios incendios, teniendo lugar su última remodelación en 1753. Presenta un estilo toscano con piedra volcánica, y los particulares balcones canarios de su fachada junto con su hermosa torre campanario le confieren un encanto muy especial.
Santa Cruz de Tenerife, un destino imprescindible
Para todo viajero que busque algo más que turismo de sol y playa y desee sumergirse en la historia de Canarias, este es un destino imprescindible. Disfruta de su clima amable, de sus calles y descubre que en Santa Cruz de Tenerife se vive sin prisas.