Al organizar una visita a Austria, lo primero que la mayoría de las personas piensan es en acercarse a Viena. La maravillosa capital austríaca se lleva las miradas de todos los turistas. Sin embargo, queremos recomendarte realizar un viaje a Salzburgo, ¡una de las ciudades más impresionantes del país!
Sin desmerecer la increíble belleza de Viena, Salzburgo es totalmente capaz de rivalizar con la capital. La «cuna de Mozart» deslumbra con sus palacios, sus verdes jardines y su deslumbrante casco histórico que, no en vano, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. A continuación, te contamos todo lo que deberías ver y hacer en tu viaje a Salzburgo.
6 actividades que hacer en tu viaje a Salzburgo
Lejos de ser una ciudad anodina, Salzburgo se presenta como una de las ciudades más bonitas e interesantes de Europa. Si bien para muchos es una completa desconocida, quienes la han visitado se han enamorado de ella para siempre.
Quizá, su mayor encanto sea su capacidad de hacerte viajar varios siglos en el tiempo, sin necesidad de coger el DeLorean. Solo con pasear por sus calles, sentirás que el mundo que te rodea se ha modificado. ¿Te apetece experimentar esa sensación? Prepara tu viaje a Salzburgo y visita los siguientes lugares.
Viaje a Salzburgo: recorre el Domquartier
Los príncipes obispos de la ciudad ejercían su poder desde el Barrio de la Catedral, o Domquartier. Se trata del actual casco histórico y, por supuesto, una de las zonas más visitadas de Salzburgo. Allí podrás encontrar la Catedral, un precioso edificio barroco del siglo XVII; y la Abadía de San Pedro, antiguo monasterio benedictino y anterior catedral, fundada en el año 696 y declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. En su cementerio, podrás ver tumbas de personalidades importantes locales.
Asimismo, en el centro de la zona se encuentra la Iglesia Franciscana, una de las más antiguas de la ciudad; y la Antigua Residencia (Alte Residenz), sitio desde donde se gobernaba Salzburgo. Puedes visitar la Alte Residenz y recorrer los aposentos, así como contemplar la colección de obras de diferentes pintores europeos de los siglos XVI a XIX.
Ahora bien, como ya hemos señalado, el casco histórico es uno de los grandes atractivos de Salzburgo. Por lo tanto, ¡hay muchísimo más para ver allí! No te pierdas, por ejemplo, el Museo de Salzburgo, donde podrás conocer la evolución de la ciudad; o el Panorama Museum, cuya obra destacada es la pintura gigante y circular de Salzburgo. ¡Tiene 26 metros de largo!
Visita la Fortaleza Hohensalzburg
Sin lugar a dudas, esta construcción del año 1077 no te dejará indiferente. La Fortaleza Hohensalzburg se encuentra en pleno corazón de la ciudad, sobre una pequeña colina. Desde allí, se controlaba el avance de las tropas enemigas y sus fuertes muros y altas torres protegían a la ciudad.
En el pasado, funcionaba como casa de los príncipes arzobispos y su tamaño era bastante más reducido. No obstante, en el siglo XVI se llevaron a cabo sucesivas reformas que la ampliaron hasta convertirse en la edificación que verás hoy en día.
Visita la fortaleza y presta especial atención al mobiliario original de los salones principescos y los apartamentos. No dudes en recorrer los museos que funcionan dentro de la fortaleza, como el que cuenta su historia o el Museo de Marionetas, y no te vayas sin tomar las mejores fotografías de Salzburgo desde sus torres. ¿Un consejo? Durante la puesta del sol, el paisaje es casi mágico.
Deslúmbrate con el Palacio Mirabell
El príncipe Wolf Dietrich mandó construir en el año 1606 un palacio barroco en honor a su amada Salome Alt. Así, se llevó a cabo la edificación del Palacio Mirabell, bajo el estilo barroco. Más tarde, a fines de siglo, se incorporaron los bellísimos jardines que lo rodean. ¿Sabías que fueron escenario de la película Sonrisas y lágrimas? Seguro que ahora quieres visitarlos.
Más allá de pasear por los jardines y cantar a vivo pulmón las canciones de la novicia María, deberías ingresar al palacio. Te encantará contemplar los detalles interiores, sobre todo el espectacular Salón de Mármol, antiguo salón de baile que funciona hoy como salón para bodas y grandes eventos; y la Escalera de los Ángeles.
Casa de Mozart, imperdible de tu viaje a Salzburgo
No puedes visitar la «cuna de Wolfgang Amadeus Mozart» y no acercarte a su casa. Esta se encuentra en el número 9 de la calle Getreidegasse. Allí nació en 1756 uno de los músicos más influyentes de la historia austríaca y, también, mundial.
El recorrido te permitirá visualizar cómo era la vida de Mozart. El mobiliario original te trasladará al siglo XVIII. Asimismo, tendrás la oportunidad de ver retratos y cartas del músico. ¿Lo mejor? No te pierdas el violín y el clavicordio que utilizaba durante su infancia.
Tras el tour por la casa de Mozart, aprovecha para recorrer esta calle. Está repleta de casas de estilo medieval reconvertidas en tiendas de artículos tradicionales locales y de moda.
Recorre las plazas de la ciudad
Salzburgo tiene múltiples plazas, al igual que otras ciudades como Roma. Entre ellas, te aconsejamos no perderte Kapitelplatz y Alter Markt. Desde la primera, tendrás una de las mejores vistas de la Fortaleza de Hohensalzburg. Además, si te gusta el ajedrez, quizá puedas jugar una partida con algún otro transeúnte utilizando el tablero y las figuras gigantes de la plaza. Si viajas en diciembre, la plaza estará llena de pequeños puestos, ya que allí se desarrolla el mercadillo navideño.
Por su parte, Alter Markt se ubica cerca de la Catedral y su principal atractivo son su fuente central y las múltiples terrazas de los cafés locales, como el tradicional Café Tomaselli. Aquí, podrás comprar unas Mozartkugeln, unas pequeñas bolas de mazapán de pistacho, nougat y chocolate que son uno de los dulces tradicionales austríacos.
Observa la ciudad desde la altura
Subir a la colina Kapuzinerberg es otra de las mejores actividades para hacer durante tu viaje a Salzburgo. Eso sí, solamente es posible realizar la subida a pie y el desnivel es marcado. Sin embargo, merece la pena el esfuerzo, pues tendrás unas vistas panorámicas inigualables de la ciudad.
Estas son tan solo algunas de las cosas que puedes ver y hacer en Salzburgo, pero hay muchísimas más. Acércate al puente Makartsteg y coloca un candado junto a tu pareja; pasea en bicicleta junto al río Salzach; o lleva a cabo una excursión a Hallstatt y sus bonitos lagos. ¿Has tomado nota de las mejores opciones para visitar durante tu viaje a Salzburgo?