¿Alguna vez te has preguntado cuáles son los platos más picantes de la gastronomía mexicana? Si tienes planeado un viaje a México, deberías conocer antes su gastronomía.
Eso sí, ten en cuenta que cuando en México dicen «picante» significa que puedes llegar a llorar. Así que prepárate si eres un amante del turismo gastronómico y, sobre todo, disfruta de los platos típicos del país.
Las 10 elaboraciones más picantes de la cocina mexicana
La cocina mexicana es famosa a lo largo y ancho del mundo por sus platos generosamente condimentados que obnubilan los sentidos, sobre todo los de aquellas personas no tan acostumbradas a los sabores fuertes.
Si estás esperando probar los platos más picantes de la gastronomía mexicana, continúa leyendo para descubrir exactamente qué contiene cada uno de ellos y escoger los que más te tienten.
Chiles rellenos
Mucho se habla siempre de los tacos y las fajitas, pero los chiles rellenos están sin lugar a dudas entre los platos más picantes de la gastronomía mexicana.
Los chiles mexicanos recuerdan un poco a los pimientos de Padrón, al menos exteriormente, porque al probarlos notarás que son muchísimo más picantes. Estos se asan y se rellenan con carne, vegetales, frijoles y especias variadas. ¿El toque final? Mucha salsa picante.
La salsa puede ser verde, hecha a base de chile jalapeño, cebolla, ajo, tomates, cilantro, sal y pimienta; de pico de gallo, con tomates, chiles jalapeños, cebolla y zumo de lima; o tabasco.
Enchiladas, entre los platos más picantes de la gastronomía mexicana
En este caso, las tortillas se embeben en una salsa a base de chile y se rellenan con carne, frijoles, mole y queso. Deliciosas, pero muy picantes, porque son coronadas con mucha salsa a base de chile.
Frijoles con chile
Este plato es solo apto para valientes. Se preparan, por supuesto, con frijoles, además de incorporar carne y verduras. No obstante, la base, como puedes adivinar, está elaborada con chile. Un plato tan rico como picante.
Camarones a la diabla
Como su nombre indica, al probarlos sentirás que tu paladar arde en el infierno. Su picor se debe al uso de chiles variados para cocinar los camarones. Asimismo, entre sus ingredientes se cuentan la cebolla, el ajo, los limones y numerosos condimentos.
Finalmente, los camarones, junto con la salsa formada por los alimentos que acabamos de mencionar, se sirven con arroz blanco y rodajas de aguacate.
Chili con carne
Seguramente, esta receta ya la conoces. No te confíes, porque, hasta que no hayas comido chili con carne en México, no tendrás idea de lo que pica.
Los trocitos de res se asan a la sartén junto con chiles rojos y verdes, cebollas, pimientos, tomate, sal y condimentos. ¿El resultado? Una mezcla jugosa para chuparse los dedos… y luego beber mucha agua.
Chapulines
Los chapulines no pueden faltar en este listado. Si bien no son un plato de comida al uso, se consumen como snack al paso. Se trata de unos grillos típicos de la región que se cocinan con una mezcla de picantes para obtener un tentempié tan rico como intenso.
Torta ahogada
La verdadera torta ahogada te dejará sin respiración. Se elabora con chile de árbol de Yahualica. Este bocadillo se prepara con pan, carne, frijoles cebollas, repollo y dos salsas: una dulce a base de jitomates, clavo y orégano; y una picante elaborada con mucho chile.
Chilaquiles
Este sencillo plato suele comerse por la mañana, aunque te recomendamos estar bien despierto al probarlo. Los chilaquiles se preparan con totopos o triángulos de maíz y una salsa roja o verde a base de chile picante.
Pozole
Si ves una sopa con una pinta bárbara y un aroma inmejorable, pregunta primero si es pozole. Entre sus ingredientes se cuentan el maíz, la carne, el tomate y el chile (mucho chile) y, por lo general, se acompaña con una ensalada de lechuga, cebolla, rábano y tostadas bañada con limón y salsa de vinagre con chiles asados.
Mole Poblano
A simple vista puede parecer un inofensivo guisado, pero el mole es una mezcla explosiva a base de semillas, chiles, especias variadas e incluso chocolate. Con esa salsa potente puedes acompañar toda clase de carnes, especialmente pollo o pavo.
En tu futuro viaje a México ten cuidado con lo que pides. Incluso un taco poco picante (según parámetros locales) puede hacer que se te salten las lágrimas… Al menos, eso aseguran los viajeros que se han animado a probar estas delicias.