Seas o no un experto del buceo, deberías aprovechar tu viaje a Colombia para descubrir la inmensa diversidad marina del Parque Tayrona. Corales, esponjas y los coloridos peces típicos del Caribe te esperan para que tu inmersión sea mágica.
El Parque Nacional Natural Tayrona es mundialmente reconocido por sus pobladas selvas tropicales, pero también por sus playas de arenas finas y blancas. En los últimos años, esta fama se ha extendido a su belleza submarina. Aunque no lo creas, en este paraíso en la Tierra, ¡lo mejor está bajo el agua! Y eso es mucho decir.
¿Cómo llegar al Parque Tayrona?
Este maravilloso parque natural se ubica en pleno Caribe colombiano, en el norte del país, específicamente en el departamento de Magdalena. Poco más de 30 kilómetros lo distancian de Santa Marta, ciudad dueña de un encantador casco colonial y un malecón con espectaculares vistas hacia el mar.
Puedes visitar el Parque Tayrona por ti mismo o contratar una excursión. En el primer caso, puedes alquilar un coche y coger la «Transversal del Caribe», o Ruta Nacional 90, en dirección a Riohacha. El trayecto dura, aproximadamente, 45 minutos.
Si te decides por un tour, tendrás la opción de llegar en bus hasta el parque o salir en velero desde la marina de Santa Marta hasta la playa de destino para la práctica de buceo.
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El buceo en el Parque Tayrona
El Parque Tayrona tiene 15 000 hectáreas de extensión, de las cuales cerca de 3 000 pertenecen a su fondo marino. ¿Puedes imaginar todo lo que podrás descubrir buceando allí? La buena noticia es que el parque tiene múltiples puntos de inmersión que se adaptan a los diferentes niveles. Así, hay spots de 10 metros para principiantes y otros de entre 20 y 40 para los más avanzados.
La zona más adecuada para el buceo es la playa de Gayraca. Esta bahía presenta coloridos paisajes submarinos, marcados por más de 50 especies de arrecifes de coral. Los mismos actúan como barrera de protección, generando un espacio ideal para la proliferación de la vida marina y, también, ¡para bucear!
Así, podrás ver meros, morenas, tortugas carey y gogó, peces loro y pargos, entre otros animales. Pero eso no es todo, si tienes suerte, quizá vea a otras especies de tortugas que llegan a la costa del parque dos veces al año para depositar sus huevos.
Además, en Gayraca se encuentran las mejores escuelas de buceo de Colombia. Podrás contratar un curso para aprender todo sobre las inmersiones y practicar acompañado de instructores con muchos años de experiencia o, incluso, sacar tu certificación PADI. Lleva a cabo tu bautismo de buceo en el Parque Tayrona o mejora tu técnica de la mano de profesionales. De cualquier manera, ¡te enamorarás de la fauna y flora del fondo marino local!
Y si el buceo no es lo tuyo, no te preocupes. También, puedes optar por la práctica de esnórquel. Las aguas son tan cristalinas que podrás ver el fondo del mar sin ningún problema. ¡Lleva contigo una cámara acuática para tomar increíbles fotografías!
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¿Qué más se puede hacer allí?
Más allá de disfrutar de su riqueza marina, el Parque Tayrona ofrece un sinfín de otras interesantes actividades para sus visitantes. Podrías, por ejemplo, relajarte en sus magníficas playas de aguas transparentes, como Cinto, Chengue o Guachaquita.
También, podrías subir a la montaña costera más alta del mundo, la Sierra Nevada de Santa Marta, de 5710 metros; o practicar senderismo por sus múltiples rutas. Asimismo, dentro de las 12 000 terrestres, podrás encontrar más de 350 especies de aves endémicas y migratorias, como la Papa Mosca Real, las Guacamayas, el Pavón Azul, el cóndor, el águila solitaria o el águila blanca.
Merece la pena señalar que el parque Tayrona se cierra al público regularmente para proteger la fauna y flora local. Antes de organizar tu viaje, corrobora que esté abierto. ¡No queremos que te desilusiones!
Anímate a vivir unos días en plena naturaleza. El parque cuenta con zona de acampada, así que monta tu tienda y no te pierdas ni un amanecer rodeado de naranjos, aromos, árboles de mango y guanábana, y orquídeas. Durante el día, sumérgete en las profundidades marinas del Parque Tayrona y, tras una buena sesión de buceo, relájate en sus gloriosas playas.