Italia es un país repleto de encanto y con muchísimas ciudades que merece la pena conocer. Entre sus principales destinos de interés, destaca Sicilia, un paraíso en medio del mar Mediterráneo, con playas de ensueño y una gastronomía para chuparse los dedos.
Si estás planificando tus próximas vacaciones, quizá deberías tener en cuenta esta isla. Dotada de hoteles todo incluido y pueblitos típicamente italianos, Sicilia te enamorará sin que puedas hacer nada para evitarlo. Descubre todo lo que puedes ver y hacer allí.
Recorre Sicilia en tu próximo viaje
Sicilia es el destino que suelen elegir los italianos para escapar del aluvión de turistas que ocupa las calles de Roma, Florencia o Venecia. Sus aguas turquesas, sus temperaturas cálidas y la amabilidad de los locales transforman a esta isla en el sitio perfecto para unas vacaciones inolvidables.
Eso sí, ten en cuenta que se trata de la isla más grande del Mediterráneo. Por ello, para recorrerla quizá te convenga alquilar un coche. Si bien existe un sistema de trenes y autobuses, perderás bastante tiempo con las combinaciones. El coche, en cambio, te ofrece la flexibilidad de visitar Palermo y Taormina, pero también otras ciudades más pequeñas del interior.
Ahora bien, ¿cuáles son esos sitios en Sicilia que no deberías dejar de conocer durante tus vacaciones? Continúa leyendo con papel y bolígrafo a mano para tomar notas, porque te lo contamos todo al respecto.
Visita Palermo
La capital de Sicilia es una ciudad de contrastes. Puede parecerte por momentos decadente y, por otros, elegante. Los palacios barrocos se entremezclan con iglesias bizantinas y mercados bizarros. Sin lugar a dudas, se trata de un destino distinto que merece la pena una visita.
Para recorrer la ciudad, prepara unas zapatillas cómodas y sal a la aventura. Sus principales emblemas están cerca, con lo cual no será necesario coger el transporte público. Empápate de los olores, los colores, los ruidos y los sabores del maravilloso Mercado de Ballarò. Allí encontrarás desde verduras y carnes hasta menaje del hogar, souvenirs y delicias locales.
Por supuesto, deberás acercarte al Palazzo dei Normanni, o Palacio de los Normandos. Esta construcción data del siglo XII, aunque posteriormente se realizaron modificaciones. El mismo se utilizaba como residencia de los gobernantes del Reino de Sicilia y, también, como sede imperial. Actualmente, funciona como Asamblea Regional. Recórrelo y asómbrate con la preciosa Capilla Palatina, con sus pavimentos de mármol y piedras preciosas; los mosaicos de la Sala dei Venti; y el dormitorio del rey.
Otro de los emblemas es la Catedral de Palermo, de estilo árabe normando. Edificada en el siglo XII, guarda en su interior las tumbas normandas. Además, puedes subir a su terraza y obtener unas vistas panorámicas fabulosas de la ciudad.
Los otros lugares de interés que no puedes obviar son Quattro Canti, una intersección del siglo XVII que llama la atención por la increíble simetría de su estilo renacentista romano tardío; Piazza Pretoria, con sus edificios elegantes y la famosa Fuente de la Vergüenza, poblada de tritones, deidades y ninfas danzantes; la iglesia Martorana, donde aún es posible ver algunos mosaicos griegos originales: el Teatro Massimo; y el Mercado de la Veccuria, perfecto para picar algo y tomar una caña. Para descansar, nada mejor que las tumbonas de la playa de Mondello.
Excursión a Taormina
Empieza tu ruta por Taormina en el Teatro Griego, emblema que ha hecho famosa a la ciudad. Este magnífico teatro está custodiado de un lado por el monte Etna y del otro por el mar Mediterráneo. A pesar de haber sido construido en el siglo III a. C. se encuentra excelentemente conservado y, por lo tanto, es una visita obligada.
Piérdete por Taormina y deja que las callejuelas te muestren sus secretos, como las puertas Messina y Catania, que funcionaban como puertas de entrada a la ciudad. Llega hasta el imponente Duomo, con su estilo medieval, y camina entre los palacios, las tiendas, y los restaurantes que rodean el Corso Umberto, la principal arteria peatonal de Taormina. Tómate también una bonita fotografía en la Piazza IX Aprile.
¿Te gustaría disfrutar de la playa? Anímate a practicar senderismo hasta isla Bella. El recorrido dura, aproximadamente, una hora en un terreno escarpado. Otra opción es coger el funicular, con el cual en cuestión de minutos te encontrarás frente a las aguas transparentes de la bahía de Mazzaró.
Si tienes ganas de hacer excursiones, sube hasta el Santuario Madonna della Roca realizando un interesante y esclarecedor Vía Crucis. Una vez en el santuario, tendrás unas vistas increíbles de Taormina. Un poco más arriba aún, te toparás con el Castillo Saraceno, una fortaleza que domina la zona desde la altura.
Otros sitios de interés en Sicilia
Sicilia es mucho más que Palermo y Taormina. Si la duración de tu viaje lo permite, aprovecha para conocer algunos de sus pequeños y encantadores pueblos. Acércate al Parque Nacional del Monte Etna en Catania, o pasea por Siracusa, un pueblo que guarda las señas de todas las culturas que lo habitaron (griegos, árabes, romanos, bizantinos y normandos).
Déjate sorprender por pueblos que parecen estar suspendidos en las laderas de las montañas, como Noto, Módica y Ragusa, o por la encantadora decadencia de los balcones oxidados de Agrigento. Y, por supuesto, disfruta de tardes enteras al sol en playas de ensueño, como la playa Capo Bianco o la playa Sampieri.
Sicilia debería ser tu próximo destino de vacaciones. Quien se acerca a esta isla, no quiere abandonarla. El único riesgo que encontrarás será querer regresar una y otra vez. ¿Estás listo para este desafío?