Se dice que los cubanos llevan el ritmo en la sangre… y así es. La música que les acompaña desde pequeños es la famosa, y cada día más popular, salsa cubana.
Nacida como un ritmo callejero, este baile ha evolucionado hasta convertirse en una danza sensual que conquista a parejas a lo largo y ancho del mundo.
El origen de la salsa cubana
En sus inicios, se trataba de un baile en solitario que se podía ver en cualquier esquina de la isla donde sonasen algunos acordes. No existía ninguna coreografía ni nada que pudiese considerarse característico de él.
Pero, pronto, todo comenzó a cambiar. Los exiliados cubanos llegaron a los Estados Unidos, donde su música se fusionó con otros ritmos, como el mambo, la conga, el jazz y el chachachá.
Así, la salsa cubana se transformó en un ritmo menos brusco y más sensual y la coreografía hizo acto de presencia. Se estipularon pasos que, más tarde, se convirtieron en su marca registrada.
La salsa cubana en la actualidad
Cada uno de los pasos de la salsa cubana armoniza perfectamente con la melodía de sus canciones. 1, 2, 3… 1, 2, 3… Este ritmo se repite sin cesar en cada una de las melodías y, también, en cada coreografía.
Sin embargo, merece la pena aclarar que no se trata de una música totalmente coreografiada. Cada pareja es libre de bailar como lo desee, siempre y cuando utilice los pasos de la salsa cubana. Eso sí, en el orden que quiera. Por ello, puede considerarse un ritmo espontáneo que da lugar a la creatividad y a la diversión.
¿Cómo se baila?
El hombre es quien marca el paso y la mujer le sigue. La idea es que el baile se vea armonioso y sensual. Por ello, suele ser recomendable que ambos miembros de la pareja tengan el mismo nivel de baile.
A la hora de bailar, la pareja puede optar por hacerlo de las manos o abrazados. Como ves, la salsa cubana da mucha libertad de movimientos.
El movimiento se verá a través de los pies y los hombros pero, sobre todo, en las caderas. Si la cadera no se mueve, la salsa cubana no existe.
El hombre y la mujer se mueven de manera cadenciosa, girando uno alrededor del otro mientras siguen el ritmo y se seducen con los movimientos y las miradas.
Si viajas a Cuba en los próximos meses, anímate a aprender a bailar la famosa salsa cubana. Disfrutarás muchísimo de su ritmo y de su seducción. (Xanax)