Los 8 mejores consejos para seguir haciendo deporte en vacaciones

• por Antonella Grandinetti

A veces, seguir haciendo deporte en vacaciones parece una misión imposible. Lo cierto es que puede llegar a dar pereza, pero con los consejos que te traemos verás que es posible y divertido.

Las recomendaciones que descubrirás a continuación te ayudarán a mantenerte en forma durante tus vacaciones. ¿Estás listo para descubrirlas?

Seguir haciendo deporte en vacaciones: 8 consejos

Practicar deporte es una elección de vida. No se trata de una actividad que debas llevar a cabo como obligación. Por el contrario, debería ser un entretenimiento y una manera de disfrutar de la vida.

Si no encuentras la motivación durante las vacaciones a pesar de estar convencido de que salir a correr, practicar yoga o ir al gimnasio es lo mejor para ti, estos consejos te vendrán como anillo al dedo.

1. Organiza tu día

Durante las vacaciones, quizá no desees madrugar. No obstante, empezar el día con un poco de deporte puede ser lo que necesitas para llenarte de energía. Además, una vez cumplido este objetivo, serás libre para descansar, pasear o hacer lo que te apetezca.

No es necesario que pongas el despertador a las 6 de la mañana. Con levantarte a las 8 estará más que bien: toma un desayuno liviano y realiza 45 minutos de ejercicio. A media mañana, estarás listo para hacer turismo.

2. Prueba un nuevo deporte

Mantener una rutina en vacaciones puede ser complejo, sobre todo si has tenido la suerte de salir de viaje. Quizá no tengas la posibilidad de continuar con tus ejercicios de siempre. Por ello, ¿qué mejor oportunidad para probar una nueva actividad?

Si estás en la playa, anímate a iniciarte en algún deporte acuático. ¿Qué tal el surf, el paddle surf o el windsurf? También puedes montar a caballo, realizar senderismo, barranquismo o, simplemente, salir a correr por nuevos espacios verdes.

3. Seguir haciendo deporte en vacaciones: ponte una meta

Seguir practicando ejercicio físico en vacaciones es sencillo siempre y cuando establezcas una meta razonable. Por ejemplo, ¿qué tal tres veces por semana? Ese sería el mínimo y, después, todo el ejercicio extra que puedas realizar será bienvenido.

4. Aprovecha el tiempo en familia o con amigos

Practicar deporte en grupo es mucho más divertido, sobre todo si eres una persona competitiva. Ponle un poco de emoción a tu vida y lleva a cabo actividades deportivas con tu familia y tus amigos.

De esta manera, te despertarás cada mañana esperando con ansias el momento en el que saldrás a practicar tu deporte. Al fin y al cabo, la compañía se disfruta y también te obliga a no rendirte.

5. Lleva lo necesario en tu equipaje

No busques excusas para evitar practicar deporte. A la hora de preparar tu maleta, guarda ropa y calzado deportivo, porque ¡nunca sabes lo que te espera en el camino! No necesitas demasiado: unos shorts, una camiseta, unos calcetines, un buen calzado, un bañador y poco más.

6. Disfruta

Esto significa que tus vacaciones constituyen tu tiempo de relax, de entretenimiento y, por ello, debes hacer con ellas lo que desees. Si quieres aumentar el tiempo de entrenamiento, ¡genial!

Si, por el contrario, prefieres reducir la carga horaria, también es perfecto siempre y cuando no abandones por completo el ejercicio físico. Ten en cuenta que retomar luego la actividad será más difícil.

De cualquier manera, si sales a recorrer una ciudad y paseas durante todo el día, esos kilómetros andados pueden contar también como ejercicio físico. ¡Y hay mucho que descubrir!

7. No te obsesiones

Las vacaciones no deben obsesionarte. No pasa nada si te salteas un día de entrenamiento, si aumentas unos kilos o si abandonas tu deporte habitual para probar uno nuevo.

8. El descanso importa

No te sobreexijas. Tener tiempo libre no implica que entrenes seis horas por día. Cuida tu cuerpo y escúchalo para saber cuándo debes parar. Duerme tus ocho horas diarias, hidrátate correctamente, alimenta tu organismo con frutas y verduras, pero también permítete algún antojo.

Recuerda que tu cuerpo es tu templo. Debes preocuparte por él y prestarle atención para que se mantenga saludable.

Como ves, seguir haciendo deporte en vacaciones puede ser un poco complicado, pero no imposible. Todo depende de tu organización y de tu fuerza de voluntad.